Recuperé un viejo cajón de madera con muy pocos materiales y tratando que el resultado final se adapte a diferentes espacios.
Aquí les muestro el terminado, con todas las opciones y detalles.
Ya lo vieron lindo y terminado, ahora pásemos al antes...
La felicidad absoluta sería que llegue a mis manos ya lijado...
Así sería mi deseo
¿ Imposible verdad ?
Mientras lijaba, lijaba.. y lijaba, pensaba que hacer con la muesca que tiene en los lados. La división original no la tenía cuando llegó al taller, solo sirven de división sin fuerza alguna para sostener algo pesado, es lógico. Pero yo quería hacer uno que resista peso y que a su vez fuera estético.
El que busca encuentra y probando llegué hasta la conformidad absoluta. En la siguiente foto fue la primera opción pero me decidí por dos listones cuadrados.
Es el típico estante desmontable que realizan los carpinteros para repisas decorativas.
1 2 3 probando...
Mientras encolaba y clavaba, me acordé al instante del papel de regalo que me trajo alguna vez mi amiga Vani y tenía atesorado.
Admito que cortar el papel es donde más rápido me late el corazón, una equivocación de medida significa replantear todo de nuevo.
Es importante coincidir el diseño en todo trabajo, en este caso: en el estante.
La frutilla de la torta... un hermoso botón en cerámica pegado en el centro.
Que suerte que tenía la muesca !!!
Buscando siempre lo positivo.
Hasta la próxima, cariños.
Cori
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